Porque la verdad ahora no me importa no tener nada. No me importa no saber una mierda de lo que piensas, no me importa que me trates bien cuando quieras y mal cuando te apetezca, no me importa que a veces hables mal de mí, ni que te enfades conmigo por gilipolleces. La verdad no me importa nada de nada, porque cuando sonríes el mundo se me viene encima, y solo quiero gritar, gritar cuanto
te amo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario